Itinerario espiritual
para el Año Jubilar de la Fundación
1ra. Etapa
ETAPA 1: JUBILEO: TIEMPO DE GRACIA
Adoración Eucarística (1er domingo del mes de octubre)
(Tener presente si está el sacerdote. Poner reclinatorio)
ETAPA 1: JUBILEO: TIEMPO DE GRACIA
CANTO DE EXPOSICIÓN: L- 2 Abundantes riquezas
JACULATORIAS: …
El Espíritu del Señor está sobre mí; me envió a proclamar el año de la gracia del Señor, Con el paso del tiempo realizarán muchas cosas que ahora no se imaginan, siempre y cuando sean fieles a su vocación, en la docilidad y en la fe.
En la naciente Familia Paulina la comunidad de hermanas crece en un espíritu de adoración y servicio.
OFRECIMIENTO:
(Símbolo: una planta que será llevada y colocada hacia un lado del altar. Fondo musical)
Para nuestro ofrecimiento de esta adoración Eucarística les invitamos a contemplar la primera etapa de nuestro centenario sobre el Jubileo: Tiempo de gracia representado en esta planta que además nos ha representado en otras ocasiones como familia paulina. Nos invita a celebrar el Jubileo de la fundación cuidando de que en cada etapa se redescubra el valor simbólico del Jubileo: sea alabar, bendecir, adorar y agradecer una experiencia vital.
Ayudémonos a adquirir la actitud interior que nos permite situar y comprender también el símbolo que se sugiere en este camino: plantar un árbol como manifestación de vida nueva, acogida por el Creador, cuidadosamente custodiada por nosotras, para que otras generaciones puedan cosechar y saborear los frutos en el tiempo venidero. Pedimos al Señor en este tiempo de gracia el don de las vocaciones para toda la familia paulina y hoy de manera especial por las pías Discípulas del Divino Maestro que son la raíz del árbol de la familia paulina generadora de vida nueva.
Caminemos, pues, juntos, sostenidos por la fidelidad de Dios que nos alimenta cada día con su Palabra y el Pan de Vida, marcando nuestros pasos tras las huellas del Maestro Jesús, como mujeres del Evangelio. Nos pones de pies para escuchar el santo Evangelio.
Lc 4:18-19
CANTO: ALELUYA (Al principio y al final del Evangelio)
MEDITACIÓN
Vamos a compartir con ustedes ahora una meditación del Primer Maestro dirigida a las Pías Discípulas del Divino Maestro el 27 de enero del 1948 en Roma después de la muerte de Timoteo Giaccardo el 24 de
Enero del mismo año, primer sacerdote paulino quien ofreció la vida por nosotras. Recordamos que estuvimos en decreto de muerte.
Meditación:
… AGRADECER al Señor por todos los beneficios recibidos a través de esta alma escogida, que pasó por esta tierra como pasan los Santos. Él fue una violeta de la humildad, muy humilde durante toda su vida. Fue un lirio de delicadísima pureza.
Todos lo reconocen, lo dicen, incluso los seglares quedaron edificados con él y me han contado detalles que muestran su singular delicadeza. Era una rosa de amor. ¡Cuán grande fue su devoción al Divino Maestro presente en la Sagrada Eucaristía!
Sobre todo, a partir de los Ejercicios de agosto pasado, de los que estuvimos más en contacto con él, notamos sus ascensos, notamos cómo aceleraba el paso hacia lo alto, como quien se apresura a llegar a la meta. Estuvo en continua oración y unión con Dios, en estos últimos días me dijo: “Aunque a los demás parezco adormecido, sigo orando en mi corazón”. Agradecemos a Dios por las gracias concedidas al Instituto a través de él, especialmente agradezcan por el bien hecho a las Pías Discípulas. Le deben tanto. Entre ustedes hay almas en las cuales él tiene como impreso, impreso él mismo. Almas, que viven de sus pensamientos, de sus ideales, de su piedad, de su vida.
… A quien me pregunta qué hacer para ser una buena Pía Discípula,
respondo: hagan como el Maestro les ha enseñado, síganlo en la devoción al Divino Maestro, en la entrega total de ustedes mismas a Él en fidelidad a los verdaderos propósitos, en la continuidad de la oración. En todo, en todas partes, siempre se comportó de manera edificante, constructiva, derramando su alma, su piedad, él mismo. ¡He aquí un hijo dócil, un verdadero devoto de la Eucaristía! Lo encontré y lo conocí por primera vez cuando era un niño de 12 años, tal como San Pablo encontró y conoció a San Timoteo muy joven. Le conocí junto a la gran delicadeza de ánimo. Le concedí y lo exhorté a la Comunión frecuente y luego diaria, cosa rara para aquellos tiempos. Por la mañana, cuando después del sonido del Ángelus, abría la Iglesia, lo encontraba puntualmente en la puerta. Venía para recibir a Jesús. El Divino Maestro lo instruyó, lo formó según su corazón.
¡Pías Discípulas, síganlo bien! Escuchen y guarden sus palabras hasta en los más pequeños detalles, hasta en los matices, hasta donde no lo hayan entendido. En él no hablaba el hombre, sino el Maestro Divino. Todas las orientaciones que les daba él las tomaba de mí; y si alguna vez me precedía tenía mi aprobación y bendición.
Pías Discípulas, sepan que su alma y su espíritu viven entre nosotros. ¡Él sigue viviendo! Muy cerca. Todos sufrimos la pérdida de esta querida alma, pero sobre todo yo sufro porque de todos he sido el más afectado. Él está cerca de ustedes en sus Adoraciones, en su apostolado Eucarístico, sacerdotal y litúrgico. Alguien sintió el dolor que ofreció su vida por la existencia de las Pías Discípulas. Es un hecho que su última Misa fue celebrada el día 12, fecha de su Aprobación Pontificia. Las bendigo para que la sigan en todo su espíritu.
(Espacio de interiorización)
CANTO: EL PACTO
EXAMEN DE CONCIENCIA
En el marco histórico de las pías discípulas del divino Maestro, yo como miembro de la familia paulina, en la presencia de Dios operante en la historia la que da valor al tiempo y al espacio en el que mi persona hallan sus dimensiones reales. ¿Me siento parte importante de esta admirable familia? ¿Por quién y para quien es preciosa mi existencia?
¿Qué elementos importantes conozco de mi congregación? ¿Qué aspectos considero con mayor frecuencia de la talla humana y espiritual del primer maestro y de las primeras personas que iniciaron y cuales elementos podría rescatar que necesite hoy más que nunca fortalecer?
¿Como comprendo mi llamada a participar en la santidad de Dios? ¿Estoy convencido (a) de que esta es mi vocación fundamental, o me desempeño pensando que la santidad está reservada a personas especiales?
Nuestro objetivo cotidiano es buscar la gloria de Dios y el bien del prójimo. Puedo constatar que en mí hay otras actitudes o intenciones no rectas y pido perdón con gran confianza comprometiéndome a una revisión más frecuente sobre estos dos puntos fundamentales…
CANTO DE PERDÓN: hoy perdóname, hoy por siempre.
3ER. MISTERIO LUMINOSO
Jesús en su vida nos habló de corazón a corazón anunciándonos el Reino de Dios y nos invitó a una conversión que nos hace ir conformando nuestro corazón con el suyo. Esta llamada, aunque es personal nos la hace a todos sin excepción. Él nos trae su Reino, pero para ser capaces de recibirlo en su dimensión más profunda, en su totalidad, nuestro corazón debe parecerse y estar cerca del suyo.
Intención:
Que nuestros jóvenes Señor, descubran los valores de tu Reino, dispón sus corazones al cambio, a la conversión y a acoger la novedad que la vida plena en Jesús Maestro les aporta.
SE REZA LA DECENA…
Oración:
Señor, danos luz para descubrir ese tesoro, esa perla que Tú nos ofreces que da sentido a nuestra existencia, que fijándonos en nuestra Madre MARIA REINA DE LOS APOSTOLES Y MADRE DEL BUEN PASTOR, pongamos nuestras esperanzas, nuestras seguridades, nuestros anhelos en Ti y no en todas aquellas cosas que pasan y terminan.
VISPERAS
HIMNO: Himno oficial año centenario en español.
CORRAN Y NO TEMAN
Corran y no teman
Mujeres del Evangelio
Llamadas por Jesús
Para anunciarlo al mundo.
¡Vamos y no teman! Vencida fue la muerte,
La piedra del sepulcro ya se ha roto.
Corran y no teman
Mujeres del Evangelio
Llamadas por Jesús
Para anunciarlo al mundo.
La muerte no ha vencido,
La vida ahora florece,
Palabra Viva en medio de nosotros.
1. Apenas nacía la mañana
Perfumes y lágrimas llevaban
En la tumba al Amado buscaban
Una Voz la llamó: “¡María! ¡Rabbuni!”
2. No busquen al Viviente entre los muertos
“Estoy vivo, con ustedes estoy
Cada día hasta el fin de los tiempos,
Por siempre, estoy aquí. ¡Vayan y anuncien!”
3. Mis palabras permanezcan en ustedes
El Espíritu se las recordará
Cada cosa, enseñará
Soy la Vida y la Verdad,
Soy Camino… a caminar…
Canto e Reserva: A tan grande sacramento L. 39
Buena Fiesta.
Casa Divino Maestro Bogotá.