Domingo 4 de junio
1) El Nombre del Padre: Alfa y Omega. Es – Era – Viene. Omnipotente.
Alfa y Omega. Para nosotros sería A y Z. (cf. Is. 44,6; Ap 1,17). Dios es el principio y el
final de la historia. ¡No hay puesto para otro dios! Los cristianos no aceptaban la
pretensión del imperio romano que divinizaba a los emperadores. Nada de lo que
sucede en la vida puede ser interpretado como una simple fatalidad, fuera de la
providencia amorosa de este nuestro Dios.
2) El Nombre del Hijo: Testigo veraz. Primogénito de los muertos. Príncipe de los
reyes de la tierra.
Testigo veraz: Testigo es lo mismo que mártir. Jesús tuvo el valor de testimoniar la
Buena Nueva de Dios Padre. Fue veraz hasta la muerte y la respuesta de Dios fue la
resurrección (Fl 2,9; Hb 5,7). 31
3) El Nombre del Espíritu Santo: Siete Lámparas. Siete ojos, Siete espíritus Siete
lámparas:
En el Ap. 4,5, se dice que los siete espíritus son las siete lámparas de fuego que arden
delante del Trono de Dios. Son siete porque representan la plenitud de la acción de
Dios en el mundo. Son lámparas de fuego, porque simbolizan la acción del Espíritu que ilumina, sacia y purifica (Ac 2,1). Están delante del Trono, porque siempre están
dispuestos a responder a cualquier deseo de Dios.
Autores varios